lunes, 15 de marzo de 2021

Memorias de una Au Pair 11

 Me tocó un divorcio y comprendí la actitud de los niños que tenían al principio, después del divorcio, más bien de la noticia, los niños estaban más relajados, habíamos vivido una experiencia difícil juntos, yo me iba a quedar un año más con ellos. 

A pesar de todo el desastre y de luego ir a recoger a la pequeña al pre escolar, que a veces lloraba porque me veía ahí, y llevarla al trabajo de su mamá y después ir a que nos pintaran las uñas a las tres, (de verdad si era como su hija, sólo les tenía que dar de comer a los niños, quererlos un montón, hablarles en español, y ver que hicieran su tarea y claro lavarles la ropa y tenderles la cama) viví muy bien, la verdad, a veces si me sentía como su mamá o a veces como la hermana mayor, otras veces la criada de la casa, a veces sentía que querían más a la perrita Stella que a mi, y muchos sentimientos encontrados, pero era algo bonito, ir a recogerlos en la parada del camión o llevarlos a la escuela o bañar a la pequeña (Ella ya lo hacía solita, sólo estaba ahi para que no se cayera y vestirla, y cantarle y recordarle que se tenía que lavar las orejas). La dejaba vestir como ella quisiera, y cuando iba por ella a veces ponía la música de rock, yo la veía muy princesa y tenía que ser más ruda para mi gusto, así que le puse otro tipo de música, le dije que mi color favorito era el negro (después ella decía algo similar). Era tan bella, le decía muchas cosas bonitas, quería que creciera como a mi me hubiera gustado que me dijera, que era capaz de hacer las cosas, que era inteligente, y la quise mucho, la abrazaba mucho aunque siempre me hacía pasar corajes. 

Mientras ellxs se acostumbraban a todo, a ya no ver a sus padres juntos, yo estaba buscándome, estaba con los cristianos, a un grupo de jóvenes que se reunían todos los martes y había comida gratis (ese fue mi enganche - carcajada), mi amiga era hija de un pastor, su papá en su país tenía su congregación y ella cantaba bonito, pero en Estados Unidos no importaba mucho, era una más y pues de todas formas ahí la acompañaba y hacía preguntas y me maravillaban los jóvenes que se reunían, había de todo tipo, de verdad, hasta parejas, hasta una pareja de casados (tenían un año menos que yo, era un líder del grupo), recuerdo cuando me habló el líder por primera vez, Dios mío, en mi cabeza sólo pasan estupideces, ¿porque no puede una persona sonreírle a alguien? estoy llena de prejuicios con los que he luchado toda mi vida, ¿De donde son? he superado algunos, otros me persiguen, otros trato de evitarlos, otros.. ahi siguen en fila para derrotarlos..., de recordarlo me avergüenza, pero estaba muy a la defensiva hacia el mundo, aún no sabía mucho de mi, ni que estaba buscando... pero encontré a Dios por allá, yo quería estudiar fotografía, pero todo lo anterior más unas reglas de la casa no me lo permitió porque tenía que manejar hasta la ciudad y no tuve el valor de hacerlo. :'(  

Basta, ya estoy más encaminado, sólo me di una vuelta en un camino que me perdí, pero bueno, hice otras cosas, leí un montón iba mucho a la librería que estaba cerca, lo amaba, o me iba al cafe a leer y estaba sola o me iba a comer helado sola o ver una película sola. 

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