Ventajas y Desventajas de trabajar en un call center 4

El decidir volver a lo mismo (casi lo mismo), les dije que si pero que
no quería hacer lo de antes y este nuevo trabajo práctica
no era lo mismo, pero casi y fue muy frustrante regresar
a lo de antes, yo pensaba que no lo iba a hacer, que sólo con
las clases me iba a quedar, pero no fue el caso. Mi ansiedad
me hizo aceptar antes de tiempo y todo fue un caos.
La escuela estaba con muchos proyectos en puerta, a la vuelta
de la esquina pero todavía en el aire, yo necesito las cosas abajo,
para poder trabajar, saber hacia donde ir, y sólo duré dos meses
hasta que un nuevo drama llegó a mi vida, regresé con la idea
de no volverme a enojar y ni involucrarme tanto en los proyectos
de la escuela, sólo hacer lo que tenía que hacer porque iban a
contaminarme y terminé más embarrada que nada en un pleito
que traían el otro nuevo coordinador y mi jefe nuevo, no el jefe
jefe (pensaba que era mi amigo y que la escuela era como
mi casa y no). Para no hacer el cuento más largo, entre esas peleas
terminé involucrada por ser maestra, si, tomé postura por el
coordinador que será el futuro crítico de cine mexicano y qué
valoraba mi trabajo de verdad. No lo pensé ni dos veces,
en una se pelaron, me molesté mucho porque el coordinador
renunció por la culpa del jefe jefe. En mi confianza y amistad
le dije todo lo que pensaba y se molestó mucho, y no me corrió
ese día, pero con la primera excusa me corrió. A pesar de meter a
una amiga que levantó un proyecto, y que es muy trabajadora.
Ya no importa, me rompió el corazón y comencé a buscar trabajo,
y no encontraba, de hecho desde Abril comencé a buscar trabajo
para mudarme. 

Ventajas y Desventajas de trabajar en un call center 3

Entre mis dos jefes había una riña en la que me ponían en
medio, tal vez de juego, pero yo de verdad siento, y siento
mucho. Me sentía muy incómoda, los dos me decían cosas
del otro que no creí, y ahora no creo que tenían razón
los dos, pero ahora me pregunto: ¿a mí que demonios me
importaban sus problemas? ¿porqué dejé que me involucraran
en sus luchas de ego?
Estar ahí, era díficil, vivir lo que se rumoraba, chismes de
escuela, egos, que yo no soporto. qué incluso me di cuenta
desde el primer semestre con mis compañeros, yo pensaba
que los artistas eran más humanos, pero no, son igual que todos,
no todos, recuerdo que no querían trabajar conmigo porque
decían que era muy torpe en lindas palabras.
El punto, es que llegaron nuevos coordinadores, y en esa
transición trabajé con el jefe en un proyecto, hice de todo,
de hecho me dijo que incluso quería que dirigiera yo,
pero no pude, no puede ni ser productora y Ad al mismo tiempo
y asistente de edición. Lo logramos, pero lloré y aprendí
muchísimo, de verdad también muchas cosas que sé, lo sé
por esos trabajos, pero pensé que jamás iba a montar de nuevo.
Los nuevos coordinadores, como no sabían el movimiento de
la escuela y no iban diario, pues yo era su asistente y estaba en
la escuela para resolverles. Igualmente, aprendí mucho y
trabajé en una película y en en unos videos con el otro coordinador,
pero sentía que me explotaban en cierta parte y no me sentía valorada,
y si, no estoy loca, varias personas que han trabajado ahí lo han
sentido, pero como un buen toro, siempre para adelante y no me
iba porque aguantaban mis depresiones, un par de veces no fui
porque no me levantaba de la cama.
Todo esto fue un poco traumático e irme al Caribe y sentirme
valorada, escuchada, que tenía buenas ideas, que era yo 100%
me cambió la vida. Por eso, regresar a trabajar ahí, lo pensé mucho.

Ventajas y Desventajas de trabajar en un call center 2

El regresar a un lugar de trabajo en donde guardaba muchos
sentimientos de amor y odio, también fue difícil. El irme de
ahí para viajar por mis sueños, fue duro, no me querían dejar
ir, querían que me quedara y que siguiera en ese lugar a trabjar
para otras personas. Una razón por la que quise realizar cine
es porque quiero expresarme y realizar mis propios proyectos,
al menos terminar con los que empecé en mis sueños, por esa
razón me fui al Caribe, insisto, no iba a cambiar mi forma de ver
el cine, sólo nuevas formas de producción y poder tener herramientas
para realizar mis proyectos, sin embargo, descubrí directores que
habían hecho cosas que mi subconsciente gritaba. En fin,  no
querían que me fuera, y no sólo eso, estar ahí me costó mucho
trabajo, mucha dignidad, comencé abriendo el portón, porque
él que abría la puerta se tardaba, después a asistir a un profesor,
que se convertió en coordinador, porque el anterior me había
puesto a hacer unas cosas y conocía muy bien la escuela,
a pesar de que los profesores no iban yo llegaba a tiempo y
siempre entregaba la tarea, todo mal, pero hacía mi intento.
Luché mucho por estar ahí, terminé siendo encargada del equipo,
aprendí precios, sobre el equipo, muchas cosas a las que le tenía
miedo, ya que en los primeros rodajes rompí dos fresneles y estuve
a punto de renunciar; el ex coordinador (el primero) no me dejó
y le guardo mucho cariño. Estar con el nuevo coordinador y
ayudarle con los profesores, con la organización, con el equipo,
me hizo invitarme a trabajar en un proyecto muy lindo de él,
eso creo que le dió más confianza al jefe, y seguí en la escuela,
el coordinador renunció, llegaron otros coordinadores y esa es otra
historia. 

Ventajas y Desventajas de trabajar en un call center 1

El tomar la decisión de trabajar en un call center ha sido una situación
muy difícil: se lo he dejado un poco al destino y a mi necesidad de
generar ingresos rápido, tener tiempo para mis proyectos.
Primero quiero contar lo que me pasó, yo estudié en una escuela de
cine privada por la que varios cineastas han pasado estudiando o dando
clases, cómo comencé a los 26 años sin saber realmente nada de cine,
fue la mejor opción y me quedé ahí, fui becaria y estuve trabajando;
como algunos sabrán me fui al Caribe unos meses y si no saben, me fui
para aprender formas nuevas de hacer cine, nuevas formas de producción,
y terminé encontrándome conmigo misma y con el inicio de como quiero
vivir mi vida, pero llegó el momento que más temía y regresé a México,
al principio me renegué de buscar trabajo para continuar con ese
proceso de conocerme a mi misma, de encontrar un poco de mi voz,
de mis gustos e hice proyectos personales, pero para los proyectos
aunque sean autogestivos, personalmente necesitaba hacer dinero
para no sentirme una arrimada en casa de mis padres a mis 30 añotes.
Y comencé a dar clases en mi escuelita, estuve dos semestres y medio y
me ayudó mucho en el proceso de mis trabajos personales, estar con gente que
hable de cine y continuar estudiando al preparar las clases, recodar los
conocimientos del caribe para compartirlos era como beber agua fresca
de alegría y emoción. En el Tercer semestre (qué no terminé), por la
presión social y mental, acepté una invitación para regresar a lo
administrativo, y no lo dudé después de varios meses en los que mis
planes que yo tenía no habían resultado, mi intensión era juntar varo para
irme a vivir al DF, pero en ese tiempo me llegó una noticia que me cambió
el rumbo de mi vida,  que por ahora estoy en espera y no puedo compartirlo
hasta más adelante, entonces dar clases y estar en lo administrativo de la
escuela era lo más perfecto, lo mejor desde un objetivo desde fuera.

no me quedan más excusas para justificar mi fracaso,
mis padres me dieron lo mejor que pudieron, no miento,
la mejor escuela, aunque no tuviera los juguetes o marcas
de moda. Nunca nos faltó nada de comer: arroz y frijoles
sin falta en el menú. Nunca me sacaron del salón para que
hablara con mis padres de que estaban atrasados en la
colegiatura como a varios compañeros.  Tal vez reusé algún
material de mi hermano mayor, o de otro estudiante, o ropa,
pero nunca me faltó nada.
Tengo 31 años, a esta edad mi madre ya tenía un hijo, una
carrera que ella misma se costeó, su carrito, había logrado
abrir su consutorio.  Mi padre que es menor que mi madre,
a los 31 años, ya tenía un hijo y a mi, trabajaba el consultorio
de mi madre y a pesar de todos sus problemas, a penas se
estaba asentando en su profesión. Yo, no tengo ni donde
caerme muerta, si no es la casa de mi mamá y papá.
Ya no puedo lamentarme y llorar de que nunca me quisieron,
cuando ahora sé que no es cierto, de hecho, creo que me
amaron demasiado.
No se me ocurre como sobrevivir, como hacer dinero, como
vivir. Y esa, no es la culpa de nadie, sino simplemente mía.
Ya no puedo lamentarme estar soltera y sin hijos, por haber
vivido mi adolescencia en la locura, antes pensaba que no
sería valorada, hoy sé que valgo más de lo que creo.
Ya no tengo mi el valor, ni la moral, ni las ganas de seguir
victimizándome.