lunes, 30 de marzo de 2020

Vómito en las escaleras


Mi experiencia hoy en la Habana fue distinta, ahora me identifican como mexicana, no me chiflan no me hacen caso, gracias a dios ya paso desapercibida, tal vez antes nos veíamos distintas y ahora somos más cubanas. 
Fui al aeropuerto sola, estuve ahí 3 horas con Mxxx, quien tenía mi celular, gracias a que mi madre de los dio. Nos hicimos amigas, creo yo, y mis planes se fracturaron; conozco a una chica de 24 años que estudia finanzas, trabaja y no tiene hijos, quiere viajar, es muy lista. Ahora estoy en un lugar tomando cerveza mientras un niño de 7 años está sentado a lado de mi comiendo palomitas y yo fumando y tomando una cerveza mientras observamos a las personas y escribo esto. 
Ella no quiere irse de Cuba; sí, pero no por siempre, quiere regresar porque cree que Cuba tiene una forma de vida muy buena. 
Me estoy tomando la cerveza más cara de mi vida en Cuba 3 cucs dónde pago 1.10 cucs en la escuela, no importa, la guagua sale a las 12 y son las 22:13 la cerveza está a la mitad, quiero irme de acá a las 11, no se sí lo logre porque siento que me están checando los de la casa porque el lugar ya cerró. 
Todo el día, he estado pensando en PXXXX, ya no quiero, quiero estar con el, quiero abrazarlo, me imagino su regreso y yo abrazándolo, ¿será que en estos días no me extrañe, ni siquiera piense en mi? 
Analizo todos los momentos y no me cuadran y platicando con una amiga tampoco, ella se lleva con él, está triste, melancólico desde hace unos días; me comenta; supongo por lo de la tesis, porque nos conocimos ahora, porque la cagué como siempre, él ha bateado a otras personas pero a mi no, me sigue dando pie, me ve, lo veo. He tenido la culpa de mucho, sí me hubiera sentado con el en la peli que se metió, sí no lo hubiera ignorado el martes; el miércoles que lo vi partir, corrí a verlo, pero estaba hablando por teléfono, me ignoro, es obvio y más sí estaba intentando hablar con él mientras tenía un celular en el oído. Tal vez tuve que ir a san Antonio cuando fue y yo no fui por mensa. 
No se que pensar, le he escrito una carta y no se sí dársela, invitarle una cerveza y leerla. No se que vaya a pasar en su regreso. No se que va a pasar mañana, ¿irá sxxxxx a la escuela? 
No se nada... 
Yo sé que PXXXX quiere o no me niega por lindo. 
Lo vi con MXXX y aún así me acerque a saludarlo, PXX sabe lo que siento por él, ya no tengo más que decir, ya le he dicho que no lo voy a buscar, pero tomo y voy por él, quiero estar con él. La última vez me dijo que lo agobiaba que le dijera tantas cosas, pero una vez me dijo que en la escuela pasan muchas cosas... Unos se casan otros no... No pasa nada, no sé que demonios... 
Tal vez necesitaba un día de sólo pensar en él para cansarme de pensarlo; de esas veces que desayuno, como, ceno, algo una y otra vez hasta cansarme; hasta hastiar. 
Jugué con El Niño tiene 7 años es tartamudo; un joven me vio hasta darle torticolis y son las 22:52 falta una hora para regresar a la escuela y dormir. Sólo me queda escuchar música :)
Creo que tuve una cita conmigo: Cené, como nunca gasté, pensé en Pxxx en soledad hasta querer odiarlo, me doy cuenta que pueda viajar sola y no perderme, hacer una amiga.... Y escuchar música cristiana que ya tiene tiempo que no lo hago. 
Estoy contenta, espero termine bien el día. 

Dios es gradé siempre... 

No hay comentarios.: