Me parece maravilloso leer las entradas que tengo programadas,
cuánto puedo vomitar, cuánto me falta, cuánto podría meter más
de mis diarios físicos y notas que voy dejando por todas partes,
o cuanto no podría escribir de frases que subrayo de libros que leo,
y que se quedan rondando en mi cabeza, tendría una publicación diaria,
así como los videos que comencé a realizar, qué de tantos decidí
tomarme tiempo entre uno y otro para pensarlos más, sino tendría
uno a la semana, pero se necesita tiempo.
Honestamente mi sueño es vivir de esto, escribir y crear, y ambos,
y tener más experiencias para escribir.
Algún día espero poder ya no hablar sólo de mi, pero bueno, puedo
escribir incluso cuando no vivo.
Por ejemplo, hace unos meses mi depresión y vida se volvió muy
caótica, y entre mis crisis pensar morirme y postergar fechas y fechas
qué entre levantones y creaciones (razones para vivir), me perdí en
internet, en una plataforma llamada youtube, incluso comencé a odiar
a los creadores, ellos no habían estudiando cine y viven filmando.
Me di cuenta que era un universo paralelo, es como si el internet fuera
otra realidad, una realidad alterna. Había días que podía pasar todo el día
viendo videos y de todo tipo, desde psicología, programas de televisión,
informativos, reportajes, y los youtubers que hacen un tipo de monólogos
dando respuestas de vida de todo tipo de preguntas y video blogs.
Después de varios análisis, me di cuenta que no eran tan estúpidos como
pensaba, al contrario; al menos no tienen un blog sin lectores; me di
cuenta que existe algo en común, el compartir, eso me pareció algo
muy bueno, pero también me di cuenta de una parte horrible, y es
como si te durmiera el cerebro. Al menos así me siento, siento como
si callara mi cerebro, como si fuera una droga; yo soy una persona que
siente mucho, hasta el existir a veces es doloroso y con persecuciones de
pensamientos que como pueden ver en las entradas (luego son muy intensas).
El ver programas basura en todos lados o las redes sociales, te desconectan
no sólo con la realidad, sino con nuestras propias emociones.
Yo estoy consciente de que yo estaba buscando tranquilizar estos pensamientos
dolorosos, estos gritos que están en mi cabeza, por miedo a varias razones,
a la paranoia de que lo que escribo se vuelva realidad, y si quiero cambiar,
eso significaría que tendría que cambiar la escritura sin ser tan catártica,
he leído mis entradas, mis diarios y casi escribo lo mismo pero con menos
faltas de ortografía, nuevo vocabulario o nuevas formas (intentos de), pero
siempre mostrando mi incapacidad de vivir. Ahora que quiero un cambio,
que estoy trabajando en uno, quiero evitar ciertos pensamientos,
¿Cómo controlar mis emociones y crear algo bello de ello?
Es un proceso en el que estoy trabajando.
No es que crea en un positivismo infantil, pero si en el poder que tengo,
en lo que he escrito y pasa, en lo que he soñado y pasa, en lo que siento
y se ha quedado albergado. Tengo miedo, de ¿qué tal si dejo de escribir o
hacer tal cosa sin dejarme llevar, seré la misma? pero la verdad, cuando trabajo algo
más controlado, más pensado y el sentimiento procesado, algo sale mejor.
En fin, ese momento obscuro del cual quiero salir, de la obsesión de las redes
sociales, porque me obsesioné hace poco (es que te da una sensación de
estar con amigos, a pesar de estar encerrada y sola aunque sea sólo una cortina),
está por terminarse, he visto "todo" y me he callado el cerebro, lo que
tenía que hacer, pero es una cadena, uno deja de pensar y de sentirse,
que deja de hacer cosas para eso y comienzas a estar en un hoyo,
lo mismo que cuando piensas y estas corriendo en círculos buscando
algo.
Yo prefiero ser una persona desconectada del mundo, pero conectada
conmigo, y seguir jugando y creando.
Confieso que es un poco difícil dejar la basura y comenzar un libro
pesado, pero poco a poco. Tengo varios libros por leer que eso me
agobia, cada día aparece uno nuevo de +250 paginas y bueno,
sólo lleno mi celular de libros que espero algún día leer.
También, mucho por crear.
Las redes sociales son otro mundo, otra vida, una que no soporto,
no tolero la mía, menos una irreal, y más donde a uno lo ponen a
competir o a ser algo que no es para ser parte de algo que no existe.
No dudo que sean herramientas necesarias, cómo la divulgación
académica en algunos canales de youtube, pero me parece más
enriquecedora leer un libro y enterarte de ello, aunque a veces
te resumen algo de lo que no tienes tiempo.
¿pero en que momento perdimos nuestro tiempo, (lo que realmente
vale)?
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